Hemos hablado de dos de los
grandes cambios del 2015 (final “renta antigua” y principio “usucapión caminos
por 20 años de uso”), pero nos hemos olvidado del tercero, que para algunas
familias, va a tener aun más importancia: EL CAMBIO DE LA LEY APLICABLE A LAS HERENCIAS
DE LOS EUROPEOS EN GALICIA.
Vamos a pensar en un portugués ex-divorciado con tres hijos a los que no quiere demasiado. O en un francés, idem. En compañía de sus nuevas esposas gallegas, ambos se han dirigido al notario de Cuspedriños, donde viven, con la pretensión
de dejar toda su herencia a sus señoras y, lo mínimo posible, a sus hijos, “a ser posible nada, señor notario”.